Cuando Puck anunció este libro lo único que pude pensar fue amo la portada, lo necesito. Luego vi que lo etiquetaron como ideal para los amantes de La selección y el mundo de la moda y empecé a dudar porque nunca he leído La selección y de moda sé nada, digo, solo veo Project Runway cuando no hay nada en la TV, jaja, pero el hecho de que fuera una competencia de moda y un fantasy me llamó muchísimo. Lamentablemente la forma en que lo promocionaron no le hace justicia a la historia.
Emmy siempre se ha sentido atraída por el diseño, la confección, las telas y, sobre todo, el glamur de la moda, pero en su pequeño pueblo no puede aspirar a nada más que atender el pub de su madre. Cuando la Casa de la Moda decide que este año las competidoras no solo serán chicas de ciudad, sino que también habrá una concursante del campo, Emmy sabe que es ahora o nunca, debe tomar esta oportunidad para que sus sueños se hagan realidad y poder diseñar para la mismísima Mademe Jolène quien, está segura, le abrirá las puertas de un mundo con el que sólo se atrevía a soñar. Pero una vez que está en la Entrevista de la Casa de la Moda nada es lo que esperaba, quizás sus sueños estén más cerca de fracasar que nunca.
Les juro que la sinopsis lo fue todo para mí, creía que iba a encontrar una competencia despiadada con concursantes aún más despiadados y que íbamos a estar rodeados de glamur, joyas, telas y deadlines que nos quitaran el aliento, pero no, simplemente tenemos a unas niñas (sí, niñas porque no se comportan ni como adolescentes) jugando a hacer ropa, pretendiendo ser malas unas con otras y soñando que sus diseños son lo último de la moda, incluso superiores que lo que hacen les expertes. Ajá, no entendí el punto de poner una competencia de moda donde solo la mejor ganará si no nos enfocamos en la competencia. Además, no hay ningún plot twist que demande seguir leyendo o algo que te sorprenda o te deje sin aliento. No sé, pero, desde mi punto de vista, nunca encontré una verdadera trama desarrollándose, solo existíamos, exactamente lo mismo que hizo Emmaline. *pone los ojos en blanco*Tenemos muy pocos personajes, son insuficientes para cargar con la historia y lo peor es que los conocemos muy superficialmente, solo pequeños atisbos de sus personalidades y estilos, pero hasta ahí, no vayamos a quererlos más que a la protagonista. Obvio nos centramos en la protagonista, pero habría aportado mucho el poder conocer un poco más a las demás competidoras y otros que salían porque, al final, los acontecimientos demandaban un crecimiento en sus relaciones (para bien o para mal) y no pasó.
Emmaline es de las protagonistas más simples de la historia, juro que podría ser invisible de verdad y, si ella no fuera la narradora, habría olvidado que estaba ahí. Emmy y su madre no la han tenido fácil, viven al día y se ganan la vida de un modo que una mujer, en su época, no debería hacerlo: dirigiendo su propio negocio, un pub. La verdadera pasión de Emmy está en el diseño y cuando ve la oportunidad la toma, no duda ni un segundo en dejar el pueblo y a su madre atrás, pero no la tachemos de egoísta desalmada, cualquiera tomaría una oportunidad así. Lo que me molesta de ella es que es demasiado confiada en sí misma, se cree la gran visionaria de la moda, única, especial, diferente, innovadora y que todos deberían arrodillarse ante sus diseño cuando, en realidad, son buenos pero no impactantes. Estoy seguro que en un par de semanas olvidaré su nombre.
Madame Jolène, la gran diseñadora y líder de la Casa de la Moda. No pude evitar sentirla como la Miranda del siglo XIX, es honesta, fría, glamurosa, toda una diva, creativa, una eminencia en su campo y despiadada con sus críticas. La amé, le da ese toque de drama a todo lo que sucede y tengo que admitir que en más de una ocasión contuve el aliento cuando aparecía. Está hecha para ser odiada y temida, sus motivaciones están dirigidas por la codicia y la sed de poder, así que sus acciones son cuestionables, pero hace lo que tiene que hacer para que sus intereses no se vean afectados, incluso si eso incluye arruinar a más de una competidora. DESPIADA, pero fiel a sus convicciones.
Tenemos dos concursantes que son las que más se relacionan con la protagonista: Sophie y Kitty, tan diferentes una de la otra que es imposible no quererlas, apoyarlas y pedir más de ellas. Mucho potencial desaprovechado.
La narrativa es muy sencilla, fue como si el libro se leyera solo (en un abrir y cerrar de ojos ya le había avanzado una tercera parte, real) y eso hace que, aunque no tengamos una verdadera trama, no se haga pesado o aburrido, siempre te queda esa espinita de otro capítulo y ya. Claro que una narrativa sencilla trae sus problemas y más en una historia que demanda estilo: hay poca ambientación, no pude apreciar el ambiente de época que se nos quiso vender y me sentí perdido, casi daba igual que fuera el siglo XV o el 2021; sabía que las descripciones eran necesarias, que tendríamos interminables párrafos de telas, bordados, diseños, patrones y todo eso que en cualquier otro libro me aburrirían, pero aquí nunca abrumaron, de hecho, hasta los eché un poco de menos, unas cuantas descripciones más no habrían hecho daño a nadie.
Algo que me gustó, una vez que me di cuenta que no todo era vestidos, competencia y adrenalina, fue que la autora metió algunos temas sociales muy interesantes para la época y el que más resalta son las diferencias sociales: lo que significa ser rico, las implicaciones y limitantes que tiene la pobreza, la diferencia de pensamiento y prioridades entre el pueblo y la ciudad y la idea que estos tienen del ser pobre. Es un tema que se va tocando poco a poco, pero está latente en cada decisión que toman, en cada palabra que dicen y en cada mirada que se dirigen. Los estereotipos están muy marcados, todas ven hacia abajo a nuestra protagonista por ser una chica de campo aunque no lo sea, pero para los de alta sociedad no ser de la ciudad es sinónimo de pobreza, ignorancia y trabajo de campo y la creen inferior y no digna de la moda porque eso solo es para los ricos. Ajá, un pensamiento muy ad hoc a lo que se profesaba en esos tiempos.
Mi gran problema fue el marketing, falló abismalmente ya que lo venden con la etiqueta de fantasy, pero no hay ni una palabra de fantasía ahí, solo está ambientado en un país que no existe y hechos que jamás sucedieron, y eso no es fantasía, es parte de una historia de no ficción. ¡MAL! Otro tag que vi fue el de romance (uh, el diabólico romance que arruina todo) y claro que no me lo creí, desde la primera interacción deducimos qué sucederá y, ¡sorpresa!, sucede. El punto que le daré a favor es que no culpo a Emmaline de enamorarse de ese muchacho, es un partidazo y hasta yo caí rendido ante sus encantos.
Quiero recalcar que me faltó competencia, yo vine aquí por ella y le dedican escasas 30 págs. Lo peor del caso es que me emocionaba cuando les ponían el reto de diseñar o crear equis cosa y sentir el estrés de que aunque tu idea sea perfecta, puede no encajar en los estándares que te solicitan. Agh, ME FALTÓ MODA, DISEÑO, GLAMUR, VESTIDOS, secretos, traiciones y oscuridad... todo eso que la sinopsis pinta como los temas centrales y que te dejarán sin aliento.
En resumen, Un vestido para los malditos, es una historia sencilla para tener entre lecturas más pesadas ya que no demanda mucho esfuerzo para leer o adentrarse en la trama. Está lejos de ser memorable, pero si te gustan las cosas relacionadas con la moda o el diseño, encontraras una historia fresca para pasar el rato.
Erick
ERICK DE MI ♥
ResponderBorrarPrimero tengo que decir que morí de risa con que sólo ves project runway cuando no hay nada en la tele. Me pasaba :'v hahaha.
Bueno, la verdad es que leí sólo una parte de la reseña porque aún no leo el libro y tengo miedo a predisponerme (como regularmente lo hago) y que mientras lo lea, no deje de pensar en lo que pusiste.
Bueno, ya tendré que pasar cuando lo termine. Por el momento coincido en que la portada es muy bonita :v hahaha
Hello!
ResponderBorrarVoy a admitir que yo también caí rendida ante la portada (¡Esta hermosa!)
Pero al igual que tú, me decepciono bastante que fuera tan sencillo y no tuviera mucho desarrollo.
Afortunadamente cumple con la función de entretener y lo pude disfrutar con todos los elementos que nos ofrecieron, así que al final de cuentas no estuvo todo perdido jejej :D
¡Hola!
ResponderBorrarPues me pasó un poco como a ti, que acabé disfrutándolo pero se me quedó como a medio gas, me faltaba esa oscuridad que se prometía.
Un abrazo
Uy a mí también me encantó la portada, de hecho estuve tentada a pedirlo por eso. Pero por la descripción y sinopsis dije no.
ResponderBorrarNo me llama para nada la Selección y tampoco soy de lecturas centradas en cotilleos.
Es una pena que no cumpliera tus expectativas, lamentable que la autora no aprovechara más la competencia y discordia de las concursantes. Aparte el tema de la moda es algo espectacular y de lo que pudo sacar más jugo.
Al menos no lo odiaste y se verá bonito en el librero xD
¡Hola Erick!
ResponderBorrarPues la reseña te ha quedado preciosa y la portada del libro es *_____*
Pero en fin, por todo lo que comentas, no creo que lo lea. Veo que tiene cosas interesantes, mete algunos temas sociales dignos de mención y algún personaje que destaca, pero en general... uffff. La ambientación y el desarrollo parecen muy pobres, y eso de que la protagonista sea tan sosa y tan absolutamente prescindible... en fin, no me convence nada de nada. Creo que sería un libro que se quedaría a medio gas y para eso pues prefiero ahorrármelo.
¡muchos besos y gracias por esta reseña tan sincera!
¡Hola!
ResponderBorrarCreo que este tipo de libros es lo que necesito en este momento, ya que quiero leer cosas un poco más tranquis, la verdad.
¡Nos seguimos leyendo!
¡Hola! ^^
ResponderBorrarValorando las cosas positivas y negativas, yo creo que podría llegar a gustarme. De todas formas ahora mismo hay libros que me interesan más.
Besos!